23/9/13

AMANECER


SUBVERSIVO


PENUMBRA


El Movimiento 19 de Abril M-19


El Movimiento 19 de Abril M-19 es una organización civilista, democrática, bolivariana y revolucionaria, que busca mediante el fortalecimiento de las organizaciones sociales y de la renovación en la participación política, el cambio que nuestro país necesita para alcanzar la Paz con Justicia Social, el cumplimiento de la palabra empeñada en los avances hacia la solución del conflicto armado  y alcanzar  el poder en los gobiernos locales, regionales y nacional con una fuerza de corte popular, democrático e incluyente.


REVOLUCIONARIA:
“La Revolución es una fiesta” Jaime Bateman Cayón.

“Bolívar Pueblo. Bolívar nuestro. Vuelve a quitar el sueño al opresor. A despertar al oprimido. Su espada empezó ya los nuevos combates. Ahora se enfrenta al yanqui. Al explotador. A quienes entregan nuestra patria al dólar. A quienes ahogan a nuestro pueblo en la miseria. La espada está ya en manos del pueblo y echó a andar por el camino de la lucha” M-19

La revolución como instrumento dinamizador de las sociedades es una necesidad inocultable en cualquiera de los momentos de la historia, que a pesar de tener como referentes grandes episodios bélicos, tiene también procesos que sin ser de alzamientos armados han generado cambios trascendentales en la vida y la cultura de quienes las han propiciado.

La revolución es vida, debe ser reivindicada como tal, como un avance hacia una sociedad más justa, es un instrumento emancipador; Bolívar decía que " El honor es la mejor guía en el laberinto de las Revoluciones"; y nosotros consideramos que el amor es la mejor guía en el laberinto de la vida; honor y amor por el pueblo son los motores de nuestro compromiso pasado, actual y futuro.

La revolución es amor, mientras el régimen trata de mantener inamovible el estado de cosas, nosotros nos enamoramos cada día más de nuestro compromiso y de la posibilidad de aportar al cambio, al avance a la democracia plena. En todo el mundo se levantan las consignas revolucionarias y Colombia no puede quedarse en la política de muerte y genocidio de la oligarquía y el imperio.

La revolución es una fiesta, porque los tiranos se sostienen especialmente con el engaño, la violencia y la manipulación, que desata la tristeza y la apatía de los pobladores de este país. Por eso nuestra respuesta debe ser la alegría, la felicidad  y la esperanza, debemos construir este proceso como cuando en una familia se prepara la fiesta de la quinceañera, con la misma predisposición y entrega, con la misma determinación de tirar la casa por la ventana. Solo así podemos avanzar en esta sociedad de guerras y muerte.

En Colombia la Constitución de 1991 ha sido traicionada y el Estado Social de Derecho que en ella se registra, se sanciona y se ordena, ha sido tergiversado; dejando los derechos conquistados con la concertación y el dialogo entre iguales y distintos, en el papel.

Por lo tanto hoy la defensa del Estado Social de Derecho, la profundización de la constitucionalidad y la aplicación en la vida real de la ley, con la abolición de aquellas reformas y leyes antipopulares y amañadas impuestas por las mayorías ilegales en el congreso y el poder ejecutivo, es nuestra tarea revolucionaria.

Hoy la revolución es la vida, el amor, la fiesta y la aplicación de la democracia real, la participación popular y la conquista del Gobierno por el pueblo.