2° El Movimiento 19 de Abril M-19

El Movimiento 19 de Abril M-19 es una organización civilista, democrática, bolivariana y revolucionaria, que busca mediante el fortalecimiento de las organizaciones sociales y de la renovación en la participación política, el cambio que nuestro país necesita para alcanzar la Paz con Justicia Social, el cumplimiento de la palabra empeñada en los avances hacia la solución del conflicto armado y alcanzar el poder en los gobiernos locales, regionales y nacional con una fuerza de corte popular, democrático e incluyente.






DEMOCRÁTICA:






“Cuando se habla de democracia piensan que es sinónimo de burguesía. Nosotros creemos que eso es una trampa ideológica. Pensamos que el concepto de democracia es un concepto revolucionario, que hay que reivindicarlo. Un concepto que la burguesía le robó a los revolucionarios como bandera. La burguesía nunca ha podido concretar ese criterio de democracia, ni lo podrá hacer. Porque las mayores desigualdades que hay en América existen exactamente en los países en donde se habla de democracia, empezando por los Estados Unidos.” Jaime Bateman Cayón Comandante General del M-19.






Cuando nos comprometemos con la democracia en un sentido llano no hacemos diferencia alguna con el discurso de la oligarquía en el poder, porque en nombre de la democracia así como en nombre de la religión se cometen lo más horrendos de los crímenes.






Por eso para hablar de democracia debemos acudir al sentido revolucionario y trasformador del concepto, al proceso de conquista de los derechos y el cumplimiento de los mismos, a los pesos y contra pesos de los poderes públicos pero también a la defensa de los derechos de las minorías los más vulnerables. La democracia PLENA, La democracia REAL, la participación de la ciudadanía activa y de sus ciudadanos ejerciendo un poder real, el PODER POPULAR.






De la misma manera en que fuimos un ejército, la Democracia en Armas, debemos crear un espacio de construcción continua, de lucha permanente por la DEMOCRACIA REVOLUCIONARIA.






Esto no es cuestión de Partidos políticos (porque además, en Colombia solo hay movimientos electorales no hay Partidos Políticos), es cuestión de completos, completos derechos, completas soluciones, completas participaciones, completos y complejos rumbos de una sociedad y una cultura que nos deben mostrar un camino más humano para nuestra Nación. Lo electoral, los Partidos, eso es sólo una parte de la discusión. Lo prioritario es la solución a la miseria, al desempleo, la salud, el hambre...






La democracia entonces se la construye, se la planifica, se la vive y se la sufre en el ejercicio diario de nuestras comunidades, las Urnas solo son herramientas coyunturales que deben reflejar el resultado de lo que hacemos continuamente con nuestros vecinos y vecinas, y la proyección de nuestras responsabilidad con las generaciones por venir.






Hay que entender que el peor de los enemigos de la Democracia en todas sus formas, aún de la democracia oligárquica, es la CLASE CORRUPTA que hoy detenta el poder en todas sus instancias, en las tres ramas del poder público. Por ende nuestras acciones, nuestro poder, nuestra organización debe enfilarse contra esa manifestación de lo que Jorge Eliecer Gaitán llamó “País Político”, para devolverle de una vez por todas el poder trasformador al “País Nacional”. Por lo cual debemos prepararnos continuamente para enfrentarlos, confrontarlos, denunciarlos y arrebatarles el poder que detentan por más de dos siglos.






No podemos olvidar que en nuestro compromiso de VIDA A LA NACIÓN, empeñamos nuestra palabra en hacer la PAZ CON LAS FUERZAS ARMADAS; pero en nuestro camino hacia la verdadera democracia debemos ganar la GUERRA A LA OLIGARQUIA, que hoy se libra en las organizaciones sociales, en las expresiones de poder desde la base, en las instancias de decisión de los municipios y en las instancias de decisión de las regiones y la Nación.






En otras palabras debemos copar con nuestros dirigentes todos y cada uno de los poderes, incluyendo las fuerzas armadas.






Somos hijos de la Constitución de 1991, por lo tanto somos los defensores del estado Social y Democrático de derecho, por ser este una conquista grandiosa de nuestra lucha y la lucha del pueblo colombiano, no como la talanquera a la lucha que han planteado los discursos totalitarios de la extrema derecha o los planteamientos entreguistas de quienes se mamaron de la lucha.






Hoy somos nosotros, los hijos e hijas de abril quienes enarbolamos la bandera de la legalidad y la constitucionalidad, porque son ellos, los corruptos y traidores, los ilegales, los inconstitucionales, los que están incumpliendo los pactos que se firmaron con el M-19.